
En El Petit Celler somos unos románticos y creemos en el amor. Y aunque no todo el mundo ve el mes de febrero como el mes del amor (que es verdad que se debe celebrar cada día) no dejamos escapar ninguna ocasión para festejar el amor.
El amor es poliédrico y tiene tantas caras como personas. Todos y cada uno de nosotros vivimos el amor, o podríamos decir los diferentes tipos de amor, de manera diferente.
Pero nos gusta asociar el amor con las burbujas, que siempre hacen fiesta y son casi indispensables en cualquier celebración.
Es por eso que este año queremos proponerte cuatro espumosos diferentes, que salen de los caminos establecidos para celebrar el amor de manera diferente, con esa mirada personal que todos tenemos.
Vardon Kennett - Cuvée Esplendor 2013 – Segunda Plenitud
Este espumoso de método tradicional fue uno de los primeros espumosos de larga crianza surgido de viñedos de altura. De un coupage muy particular de pinot noir, chardonnay y xarel·lo, y de viñedos plantados en el Penedès superior a más de 500 metros y de viñedos en el Pirineo a más de 900 metros de altura saca al mercado una pequeña parte de la producción de su primera añada, que se guardó sin degollar en la bodega de Sta. Margarida d’Agulladolç. Más de diez años de crianza tranquila que han ido afinando la burbuja al mismo tiempo que la han hecho madurar.
Una joya enológica para disfrutar y celebrar el amor por los grandes productos.
Un espumoso de método tradicional y con 9 meses de crianza en rima que nos llega de Chile. Este producto, elaborado por Miguel Torres Chile surge para recuperar la variedad país, la primera variedad llegada al país andino en 1547 de la mano de los misioneros. Una variedad que actualmente no tenemos en la península Ibérica que da vinos suaves y afrutados, golosos y fáciles de beber y que en su versión espumosa fue galardonada como mejor espumoso del mundo con una variedad autóctona.
Para celebrar los amores diferentes.
El amor y la variedad moscatel son una de las asociaciones clásicas en los países ribereños del Mediterráneo. Si el vino tranquilo Viña Esmeralda es uno de los vinos más populares para iniciarse en el mundo del vino gracias a su carácter afrutado, juguetón y seductor, no dejes de probar su versión con burbujas. Elaborado con el método Charmat, donde la segunda fermentación se hace en un tanque de acero hace que no pierda ninguna de las características propias del vino con una faceta aún más festiva.
Un amor muy de nuestra casa.
A veces no podemos o no queremos beber alcohol. Pues no hay que renunciar al carácter alegre y festivo de las burbujas gracias a este producto de la gama NATUREO a base de un vino desalcoholizado de la variedad moscatel, lleno de sabor y con su lado "explosivo" gracias a las burbujas (añadidas).
Por un amor muy natural.
Sea como sea que veas el amor, lo celebres cuando lo celebres, brinda con las burbujas "diferentes" que te proponemos.
¡Viva el amor!