Vinos afrutados: qué son y cómo disfrutarlos

Vinos Afrutados: de cítricos a los más dulces

 

¿Te gustan los vinos afrutados? ¿Un tinto afrutado, un blanco afrutado?

Seguramente pensarás que un vino afrutado es un concepto en sí mismo redundante ya que todos los vinos se elaboran a base de una futa: la uva. Pero ¿a qué se hace referencia cuando hablamos de vinos afrutados? Se trata de vinos que evocan matices y aromas a fruta de forma limpia en nariz y boca, sin considerar entre estas a la uva. Aquí la clave está en el sabor y aroma del vino.

 

Si eres un amante del vino seguro que estarás familiarizado con conceptos como cuerpo, acidez en boca, taninos, notas, terroir, y otros conceptos que hacen referencia a la calidad y disfrute del vino. El sabor del vino es un concepto complejo, donde intervienen diversos elementos que hacen que un vino sea redondo en boca o que destaque por su acidez o sus notas frutales o especiadas. La personalidad de un vino viene dada por su proceso de elaboración, tipo de uva utilizada, zona de cultivo de la vid, su proceso de crianza o envejecimiento, es a través de estos procesos lo que permiten elaborar un vino afrutado. Veamos algunas variedades de vinos afrutados:

 

Vinos afrutados cítricos

 

Cuando hablamos de un vino afrutado, hacemos referencia a esas notas de sabor que desprende en boca y nariz. De esta manera podemos encontrar notas cítricas en vinos blancos o vinos espumosos donde la lima, la naranja o limón dejan ese toque ácido en boca. Este tipo de vinos están elaborados con variedades de uva como Sauvignon Blanc, Verdejo, Albariño, la conocida uva Chardonnay o ese aroma a mandarina que aporta la uva Gewürztraminer. Algunos ejemplos de vinos blancos afrutados cítricos son:

 

 

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Vinos afrutados tropicales


Además, de los cítricos, podrás encontrar en el mercado vinos que destacan por su carácter afrutado a base de frutas tropicales como banana, papaya, mango, piña o futa de la pasión. Se trata de vinos dulces y secos, en su mayoría blancos elaborados con uvas Riesling o una uva Chardonnay cultivada en zonas más cálidas.

 

Vinos afrutados frutos rojos

 

Los frutos rojos también tienen protagonismo en los vinos afrutados. Se trata de notas que recuerdan a la cereza, frambuesa, fresa, ciruela, arándano y grosella. Los vinos tintos afrutados con un toque a cereza se logran gracias a su elaboración a base de Garnacha, Pinot Noir o Sangiovese utilizada para elaborar Chianti. Por su parte, los vinos con notas a base de fresa y frambuesa son más típicos de los vinos tintos afrutados españoles elaborados con Tempranillo.

 

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Existen otras variedades de vino afrutado inspirados en frutas oscuras representadas por la variedad de uva Cabernet Sauvignon y Syrah. Este tipo de vinos dejan un sabor en boca a ciruela negra, grosella negra, cereza negra, dátil e higo.

 

Vinos afrutados notas ácidas

 

¿Eres de vinos con mayor acidez? Prueba los vinos elaborados con uvas Grüner Veltliner o Albariño que aportan ese toque aromático en boca a manzana verde. Mientras que las variedades Chardonnay y Champagne inspiran a sabores de frutas del huerto como manzanas rojas y peras, donde el dulzor es más característico.

 

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Como podrás ver los matices en el vino marcan la diferencia, las notas afrutadas forman parte de la personalidad de un vino y es lo que acabará enamorando a tu paladar. Ahora comparte con nosotros, ¿qué tipo de vino afrutado prefieres?

Por Petit Celler